La Empresa y el Reto del Trabajo en Remoto
La reciente crisis desencadenada por la pandemia COVID-19 ha colocado en un primer plano el trabajo a distancia, bien sea teletrabajo, bien sea trabajo en remoto.
Conviene distinguir y diferenciar las figuras de, por un lado, el teletrabajo, y por otro, el trabajo en remoto.
El teletrabajo consiste en trabajar a distancia, desde cualquier lugar que no sea la oficina o lugar habitual de trabajo.
Trabajar en remoto se refiere a trabajar en línea, online o de manera virtual. Significa trabajar en sesión virtual mediante un acceso remoto, habilitando una sesión de usuario centralizada en un entorno tecnológico consolidado como puede ser un entorno VDI, o bien mediante accesos a una red privada virtual (VPN).
Trabajar a distancia y trabajar a través de un acceso remoto son modalidades de trabajo indudablemente relacionadas pero que se refieren a aspectos distintos.
Trabajar a distancia o en modalidad de teletrabajo supone trabajar fuera de la oficina; única y exclusivamente se refiere al emplazamiento físico del empleado o colaborador.
Sin embargo, trabajar en remoto no implica necesariamente trabajar fuera de la oficina, sino que se trata de un concepto que se despliega en una estructura de sesiones de usuarios y terminales que permite a cada uno de los perfiles de usuario el acceso a aplicaciones, datos y recursos del sistema.
En síntesis, se puede trabajar en remoto de manera presencial en la oficina de la empresa, y se puede teletrabajar desde un entorno local aislado, al margen de la infraestructura tecnológica de la empresa.
En ATIC apostamos por el trabajo en remoto como una respuesta adecuada a las exigencias que de forma paulatina nos conducen al trabajo en el entorno doméstico, alejados de los centros de trabajo tradicionalmente ubicados en oficinas corporativas.
Ventajas de trabajar en remoto
- Centralización y consolidación de sistemas
- Reducción de consumo, costes de equipamiento y hardware
- Mayor seguridad y protección del entorno de Tecnologías de la Información (TI)
- Mayor agilidad de despliegue de nuevos usuarios y apps
- Mejor gestión y control de usuarios y perfiles de usuario.
Exigencias del trabajo en remoto
- Necesidad de infraestructura física de consolidación
- Implantación de entornos tecnológicos avanzados
- Necesidad de virtualizar recursos y asegurar terminales
Cada vez es mayor el número de empresas del sector privado como de entidades del sector público que optan por ofrecer o implementar el trabajo en remoto con el objetivo de flexibilizar puestos de trabajo y hacer más seguro y ágil su entorno tecnológico.
La implantación de entornos tecnológicos de trabajo en remoto que dispongan de acceso seguro es ideal para hacer posible el trabajo a distancia de una forma cómoda y segura, con apoyo en datos en continua generación y modificación en la actividad diaria de los trabajadores a distancia.
Con independencia de hacer real la posibilidad de trabajo en remoto, la prioridad de todo negocio debiera ser consolidar, centralizar y virtualizar los recursos de su infraestructura tecnológica con objeto de facilitar su efectividad global.
Os animamos a contactar con nosotros para diagnosticar vuestras necesidades en el ámbito de implantación y despliegue de entornos de trabajo en remoto.
Os esperamos.